8 de diciembre de 2008

el próximo martes

dentro de una semana aproximadamente, terminaré la escuela y sí... tengo miedo



supongo que ya han visto mucho ese video...

mejor este




y no sé que haré con mi vida. Si se que quiero hacer, pero no sé como hacerlo. Tengo muchos planes, irme a pasear por el país, con una mochila al hombro, como Chris Maccandles (sólo que en vez de huir de las ciudades, quiero introducirme en ellas y medio vagabundear en ellas, olerlas, amarlas u odiarlas, visitarlas, emborracharme y drogarme de ellas), pero no soporto estar sucio. Estar sólo y llevar mi música sí, serían los mejores días, pero no soportaré más de tres días estar sucio. Tendré que ahorrar mucho para hostales con agua caliente.


hace mucho, cuando le di un descanso a este blog, dije que me esperaran por otros lados. Tenía la loca idea de empezar a hacer cortos y crear. Hoy, como más de un año después, por fin estoy a punto de terminar uno. Hice otro, con apoyo de la escuela y lo acabaron pasando en una muestra local de pura chiripa. Desde la sinopsis hasta el final, esta plagado de errores de novato, pero todavía nos sigue dando orgullo cada vez que lo vemos los miembros del equipo. Se llama La última vez que te vi. Deberían buscarlo en google.

Este que acabamos de hacer (principalmente entre yo y otro compa) luego se los pasaré... no tiene nada espectacular pero de verdad creo que ese es su fuerte. Es muy simple y poco pretencioso, relajado, algo que se ve muy poco en esto del cine independiente y sobre todo de los cortometrajes mexicanos, donde más que una competencia sobre ver quien hace el mejor trabajo la competencia parece ser sobre quien puede ser más artístico y abstracto (mamón, pues). El proceso está cabrón y es muy desgastante, hasta para hacer un corto muy simple de diez minutos. Apenas me acabo de enterar lo poco confiable que puede ser la gente, lo complicado que es hacer un corto de diez minutos con un equipo de 5 personas, lo mucho que se necesita de esas 5 personas y, a pesar de lo mucho que te puedan ayudar, cuanto todo depende de uno. Ayn Rand tenía razón, estaba loca y el final feliz de "El Manantial" no tiene sentido ni una lógica razonable que tenga sentido al interior del mundo creado por la novela, ok, pero tenía razón en eso de que en este mundo el egoísmo es lo único que te puede sacar adelante.

Bueno ya, sólo escribí esto porque tenía miedo, y sigo teniendo miedo, pero bueno...

compren The Dark Knight, no mamen.